Bobby Walker (Ben Affleck) está viviendo el sueño americano: tiene un gran trabajo, una bonita familia y un porsche despampanante en el garaje. Cuando la compañía para la que trabaja decide reducir plantilla le deja en el paro junto a sus compañeros Phil Woodward (Chris Cooper) y Gene McClary (Tommy Lee Jones). Es entonces cuando los tres hombres se verán obligados a replantearse sus vidas y sus papeles como maridos y padres.
Pocos cineastas se atreven a reflejar al hombre americano tan claramente vulnerable y destrozado. Wells ha creado para su ópera prima, una película dura y nada comercial. Abordando un tema que por desgracia conocemos bien después de lo vivido en el último año.
Lo mejor: Kevin Costner
Lo peor: que el tramo final no se ajusta demasiado a la realidad...
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